El atrio del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, fue el escenario de una de nuestras cenas en las que se personaliza y se piensan todos los detalles.
La arquitectura impecable de Richard Meier impone a la hora de decidir un montaje de comedor. Nos gusta respetarla, buscar un equilibrio y una armonía. Veréis en las fotos las 2 mesas imperiales que montamos siguiendo la planta del edificio. El mobiliario y las mantelerías eran de un blanco inmaculado, preparado para recibir el color corporativo que bañó el entorno al empezar el banquete.
Esther Conde
Catering de Barcelona
El éxito se encuentra en la perfección de los pequeños detalles